En un viernes marcado por reveses judiciales, el exsenador Edgardo Kueider enfrentó nuevos escollos en su situación legal. La jueza federal Sandra Arroyo Salgado ordenó allanamientos en su despacho en el Senado y en oficinas de asesores y personal administrativo vinculados a su gestión. La medida se da en el marco de una investigación por una amplia gama de delitos que incluyen enriquecimiento ilícito, abuso de autoridad, cohecho y lavado de dinero, entre otros.
Los operativos en el Palacio Legislativo
Los allanamientos, concretados durante la tarde, abarcaron tanto el despacho de Kueider en el tercer piso del Palacio Legislativo como oficinas en el Anexo del Senado, ubicado sobre Av. Hipólito Yrigoyen al 1700. Bajo la supervisión del Juzgado Federal de San Isidro, efectivos de Gendarmería Nacional registraron exhaustivamente los espacios.
“Se revisaron archiveros, biblioratos, cajones de escritorio y se procedió al secuestro de documentación, computadoras, pendrives y llaves de cajas fuertes”, detallaron fuentes judiciales. Además, se confiscaron dispositivos relacionados con criptominería que podrían aportar pruebas clave en la causa.
La investigación, liderada por la Fiscalía de Fernando Domínguez, apunta a determinar el presunto rol de Kueider en negociaciones incompatibles con sus funciones públicas y posibles maniobras de tráfico de influencias.
Un traspié judicial tras otro
Este viernes negro para Kueider no se limitó a los allanamientos. Horas antes, el juez Enrique Lavié Pico, del fuero Contencioso Administrativo Federal, rechazó un amparo presentado por el exsenador para ser restituido en su banca.
En su fallo, Lavié Pico argumentó que la solicitud “no puede ser revisada en esta sede judicial porque su examen constituye una competencia exclusiva y excluyente atribuida al Senado de la Nación”. Asimismo, el juez respaldó el rol de Victoria Villarruel, quien presidió la sesión del 12 de diciembre en la que se votó la expulsión de Kueider del cuerpo legislativo.
El magistrado destacó que la vicepresidenta del Senado “no ha tenido injerencia alguna en el resultado de la votación”, limitándose a cumplir con su función de presidir la sesión parlamentaria.
Un caso de alto impacto político
La investigación que involucra a Kueider tomó mayor relevancia tras su detención en Paraguay, donde fue aprehendido con más de 200 mil dólares en efectivo. Este hallazgo alimentó las sospechas sobre posibles maniobras de lavado de dinero y puso en marcha las acciones judiciales que derivaron en los allanamientos de este viernes.
Mientras la Justicia avanza en la recolección de pruebas, el exsenador entrerriano enfrenta un panorama complicado. Su intento de regresar al Senado fue frustrado, y las acusaciones en su contra suman cada vez más elementos que fortalecen la investigación.
La causa continúa en manos del Juzgado Federal de San Isidro, donde las pruebas incautadas serán analizadas para determinar el alcance de las responsabilidades del exlegislador en las presuntas irregularidades que se le imputan.