Cuatro policías imputados por un allanamiento ilegal con robo y armas plantadas en un nuevo caso que expone las irregularidades dentro de la fuerzas de seguridad, cuatro agentes de la Brigada Motorizada de la provincia fueron imputados por una serie de delitos graves.
El episodio, ocurrido en el barrio República de La Sexta, involucró un allanamiento ilegal, el robo de pertenencias y la plantación de un arma para incriminar a un joven, quien estuvo detenido injustamente durante cinco días. La investigación fiscal reveló que el procedimiento fue presentado ante la Justicia con documentos falsificados.
Un operativo cargado de ilegalidades
El caso comenzó el 7 de diciembre cuando los agentes interceptaron a Milton Ezequiel P., un joven de 26 años, bajo el pretexto de que no poseía la documentación de su moto. Según la versión inicial de los policías, Milton ofreció llevarlos a la casa de su hermano para buscar los papeles. Sin embargo, según el relato oficial, al llegar al domicilio intentó escapar con un bolso y arrojó un arma de fuego sobre los techos de una vivienda cercana. Este relato, que en un principio fue comunicado como un «operativo positivo» por el Ministerio de Seguridad, resultó ser completamente falso tras las investigaciones del fiscal Pablo Socca.
La fiscalía demostró que, en realidad, los agentes no solo privaron de su libertad a Milton sin causa alguna, sino que también ingresaron de manera ilegal a la casa de su hermano. Allí presuntamente golpearon a los presentes, sustrajeron 70,000 pesos y un teléfono celular. Luego, continuaron su operativo ilegal en la vivienda de la madre de Milton, donde también robaron dinero y pertenencias. Finalmente, para justificar su accionar, plantaron un revólver calibre .38 en un techo cercano, alegando que había sido descartado por el joven durante su huida.
La manipulación de los hechos
El fiscal Socca describió cómo los agentes armaron un caso ficticio para encubrir sus acciones. Las actas del procedimiento, los croquis de lugar, las supuestas autorizaciones de ingreso y los informes balísticos fueron falsificados para sostener la versión policial. Incluso se presentaron informes médicos manipulados que ocultaban las lesiones sufridas por la víctima, quien fue brutalmente golpeada durante el operativo.
Uno de los testimonios más impactantes de la causa provino de un testigo que escuchó a los policías decir: “Poné que la encontramos en el techo y listo. Si no, le pegamos un tiro y ponemos que se nos escapó”.
Los acusados y su situación judicial
Los imputados son Lucas Brest, oficial de 33 años; Matías Nicolás Ovando, suboficial de 29; Julián Oscar Márquez, suboficial de 27; y Bernardino Fernández, suboficial de 25. La jueza Paula Álvarez, tras escuchar los cargos presentados por el fiscal Socca, ordenó la prisión preventiva de los cuatro acusados por un plazo de seis meses.
Los delitos que enfrentan incluyen privación ilegal de la libertad, falsificación ideológica de documentos públicos, allanamiento ilegal, robo agravado por su condición de funcionarios públicos, portación ilegal de arma de guerra, incumplimiento de los deberes de funcionario público, amenazas coactivas y lesiones leves calificadas.