La crisis financiera golpea con fuerza al sector agroalimentario argentino. En las últimas horas, cuatro importantes empresas del rubro solicitaron la apertura de concursos preventivos de acreedores ante la Justicia comercial debido a su alto nivel de endeudamiento. Se trata de dos compañías del Grupo Los Grobo (Agrofina y Los Grobo Agropecuaria), la productora de insumos Surcos y la láctea SanCor.
Estas empresas acumulan un pasivo total de 560 millones de dólares, reflejando el impacto de la caída en los precios internacionales de los granos y el atraso cambiario en Argentina.
Los Grobo, entre la reestructuración y la incertidumbre
El Grupo Los Grobo, uno de los actores más influyentes del agro argentino, enfrenta una delicada situación financiera. La presentación del concurso preventivo de acreedores para Agrofina y Los Grobo Agropecuaria responde a un volumen de cheques rechazados por 3.700 millones de pesos y la imposibilidad de alcanzar acuerdos con sus acreedores, entre los que figuran entidades bancarias como Galicia, Santander, HSBC, Bapro, Supervielle, Hipotecario, Macro e Industrial.
Actualmente, el 90% del grupo pertenece al fondo de inversión Victoria Capital Partners, mientras que Gustavo y Matilde Grobocopatel conservan el 10% restante. Con operaciones en Buenos Aires, La Pampa, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, la empresa cuenta con 34 sucursales, 27 depósitos de insumos y 16 plantas de acopio, además de una capacidad de almacenamiento de 350.000 toneladas y una red de 500 empleados.
Pese a la crisis, desde la compañía aseguraron que seguirán operativas y trabajando en una solución integral que permita reordenar su estructura financiera y mantener el compromiso con productores, proveedores y clientes.
Surcos también entra en default
Otra empresa afectada es Surcos, proveedora de insumos agrícolas, que declaró su default en diciembre pasado y acumuló deudas por aproximadamente 107 millones de dólares. La compañía oficializó su solicitud de concurso preventivo ante la Comisión Nacional de Valores (CNV), con el objetivo de reordenar sus pasivos y garantizar la continuidad operativa.
A través de un comunicado, la firma destacó que la medida busca atraer nuevas inversiones y reestructurar su modelo de negocios para asegurar su sustentabilidad en el largo plazo.
SanCor, una crisis que se profundiza
Por su parte, SanCor, la histórica cooperativa láctea, también recurrió al concurso preventivo para hacer frente a su difícil situación financiera. La empresa, que supo procesar 4 millones de litros diarios de leche, hoy ha reducido su capacidad operativa a solo 180.000 litros y pasó de 12 plantas a 6 en funcionamiento.
El sector agroindustrial argentino atraviesa un momento de extrema complejidad, y la presentación en concurso de estas cuatro grandes compañías refleja el delicado estado financiero en el que se encuentran muchas empresas en el país. Ahora, los próximos pasos dependerán de las negociaciones con los acreedores y la capacidad de estas firmas para encontrar un camino que les permita garantizar su continuidad operativa.