El presidente Javier Milei generó una nueva ola de controversia luego de su polémico discurso en el Foro Económico Mundial de Davos. Tras haber sido acusado de expresiones discriminatorias y señalado por políticos y periodistas, el mandatario lanzó un descargo contundente y nuevas amenazas hacia sus detractores.
«La libertad avanza y nada impedirá que lo siga haciendo»
En una publicación extensa en sus redes sociales, Milei defendió su postura, negando haber realizado comentarios discriminatorios contra la comunidad LGBTQ+ y criticando a quienes, según él, buscan difamar su gobierno. El mandatario aseguró que su discurso en Davos fue un enfrentamiento directo contra lo que definió como “la ideología de las élites globales” y señaló que las críticas que recibió son intentos de desprestigio.
«No nos conmueven sus actos de falsa indignación. No nos van a hacer sentir culpables de algo que no somos», escribió el presidente en referencia a los comentarios de periodistas como Ernesto Tenembaum y figuras políticas como Jorge Macri. Además, afirmó que la expansión del Estado es “la muerte de la libertad” y subrayó que no permitirá que se impongan privilegios desde el aparato estatal.
La polémica en torno al discurso en Davos
El discurso de Milei en el Foro Económico Mundial estuvo marcado por su rechazo a la llamada “agenda woke” y su defensa de la libertad individual frente a las políticas globales. Sin embargo, su intervención fue criticada dentro y fuera del país, acusándolo de discriminación y extremismo.
La Casa Rosada reforzó la defensa de Milei, enmarcando su discurso como un paso más en la lucha por transformar las estructuras del Estado y llevar a cabo una “batalla cultural”. Sin embargo, las expresiones del presidente han generado repudios tanto desde sectores progresistas como de algunos aliados conservadores.
Marcha LGBTQ+ y tensiones crecientes
Mientras tanto, la comunidad LGBTQ+ y organizaciones feministas han convocado a una marcha federal en rechazo a las expresiones de Milei, señalando que sus declaraciones legitiman la discriminación. “No se pongan en nuestro camino”, concluyó el presidente en su publicación, dejando clara su postura desafiante.
El debate sobre los límites del discurso político y el impacto de estas declaraciones en una sociedad diversa se encuentra en el centro de la discusión pública. Con la atención mediática global enfocada en su gestión, las tensiones entre la administración libertaria y sus críticos parecen estar lejos de calmarse.