El fuego volvió a encender las alarmas en la isla de Los Mástiles, ubicada frente a Granadero Baigorria, donde brigadistas y bomberos santafesinos trabajan intensamente para combatir dos focos de incendio activos desde este jueves. Con el humo ya perceptible en localidades como Rosario, el operativo se reanudó temprano este viernes con un equipo compuesto por 50 brigadistas, un avión hidrante, helibaldes y la colaboración de lugareños y la Cooperativa Portuaria de Puerto General San Martín.
Un desafío para los brigadistas
El secretario de Protección Civil de Santa Fe, Marcos Escajadillo, lidera el operativo desplegado en este terreno de características complejas, definido como “inhóspito” y altamente inflamable. Según explicó, los equipos trabajan hasta la caída del sol, dado que las condiciones de la isla dificultan cualquier intervención nocturna.
“Todavía hay focos activos y seguimos desplegando todos los recursos disponibles. La prioridad es resguardar las viviendas y el complejo de cabañas cercanos, mientras garantizamos la seguridad de los brigadistas”, indicó Escajadillo.
Durante la primera jornada de tareas, el avance del fuego se complicó por las intensas ráfagas de viento que, provenientes tanto del norte como del sur, dificultaron los esfuerzos de los equipos de combate.
Impacto ambiental y prevención
Este incendio revive la preocupación por los recurrentes siniestros en el Delta del Paraná, un área que había registrado una reducción del 90% en los incendios durante 2024, según datos oficiales. Sin embargo, las condiciones climáticas propias del verano, con altas temperaturas y vegetación seca, vuelven a generar escenarios propicios para el fuego.
La isla de Los Mástiles, declarada área natural protegida en 2020, enfrenta un desafío constante para su recuperación. A pesar de los esfuerzos, estudios de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) revelaron que el territorio aún no se ha recuperado por completo de incendios anteriores, que arrasaron buena parte de sus 916 hectáreas.
Recursos desplegados
Además de los brigadistas y bomberos zapadores y voluntarios, el operativo cuenta con el soporte de un avión hidrante, helibaldes y un helicóptero facilitado por la Cooperativa Portuaria. “Las herramientas aéreas han sido fundamentales para complementar el trabajo de quienes están en tierra”, destacó Escajadillo.
Asimismo, los brigadistas trabajan equipados con protección especial para evitar riesgos ante la presencia de animales peligrosos, como las yararás, que suelen desplazarse hacia zonas no quemadas durante los incendios.
Recomendaciones a la población
Con el verano generando un mayor movimiento en las islas y el río Paraná, Escajadillo hizo un llamado a la responsabilidad de los visitantes para prevenir nuevos incendios:
- Apagar correctamente el fuego: Si se prende fuego para cocinar, apagarlo con agua y asegurarse de que no queden brasas activas.
- Evitar prácticas riesgosas: No encender fuego en días de viento o altas temperaturas.
- Alertar rápidamente: Si se detecta humo o un foco de incendio, llamar al 911 de inmediato.
Un trabajo constante
El operativo continuará hasta las 21 horas de este viernes, con el objetivo de controlar los focos activos y evitar la propagación del fuego. “Se ha trabajado bien, hemos protegido las viviendas y el complejo de Puerto Pirata, pero seguimos en alerta”, concluyó Escajadillo.
La reanudación de los incendios en las islas refuerza la necesidad de acciones preventivas y políticas de conservación, especialmente en zonas de alta sensibilidad ecológica como el Delta del Paraná. Mientras tanto, los brigadistas mantienen la lucha para proteger tanto el ecosistema como las comunidades cercanas.