La disputa entre el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, y la empresa Mercado Libre escaló en las últimas horas luego de que el mandatario provincial acusara a la plataforma de comercio electrónico de facilitar ventas en negro y realizar bicicleta financiera. La compañía de Marcos Galperín no tardó en responder, desmintiendo las acusaciones y denunciando una campaña de «difamaciones» por parte del gobierno santafesino.
Pullaro: «No estamos subiendo impuestos, estamos combatiendo la evasión»
El conflicto comenzó luego de que Mercado Libre expresara en redes sociales su rechazo a un supuesto aumento de Ingresos Brutos en Santa Fe. Pullaro desestimó esas críticas y aseguró que su gobierno no incrementó tributos, sino que busca regularizar operaciones que antes se hacían sin pagar impuestos.
«Santa Fe está cobrando impuestos a operaciones que antes se realizaban en negro. No estamos subiendo tributos, sino garantizando equidad fiscal», sostuvo el gobernador durante un acto en la capital provincial.
Según los registros de la Administración Tributaria de Santa Fe (API), en diciembre se detectaron casi 40.000 transacciones sin declarar en la plataforma de comercio electrónico más grande del país. Ante esto, el gobierno provincial dispuso diferenciar las tasas de Ingresos Brutos, aplicando alícuotas más bajas para quienes cumplen con sus obligaciones fiscales y aumentando el control sobre quienes operan por fuera del sistema.
Además, Pullaro también apuntó contra la billetera digital Mercado Pago, sugiriendo que realiza maniobras de bicicleta financiera al demorar la acreditación de fondos a los usuarios para beneficiarse de la especulación financiera.
La respuesta de Mercado Libre: «Nos difaman para acallar un reclamo legítimo»
Desde Mercado Libre rechazaron tajantemente las acusaciones del gobernador y su ministro de Economía, Pablo Olivares, asegurando que la compañía cumple con todas sus obligaciones impositivas y que es agente de retención y percepción de impuestos en sus operaciones.
En un comunicado difundido este miércoles, la firma de Marcos Galperín acusó al gobierno santafesino de querer desviar la atención de lo que considera un impuesto excesivo sobre los Proveedores de Servicios de Pago (PSP), que pasó del 5% al 9%, convirtiéndose en una de las alícuotas más altas del país.
«El Gobierno de Santa Fe respondió con difamaciones en lo que parece un intento por acallar un reclamo genuino. Desmentimos categóricamente todas las acusaciones: Mercado Libre cumple con sus obligaciones impositivas y es agente de retención y percepción de las transacciones vinculadas con sus usuarios», indicó la empresa.
Además, la compañía advirtió que es falso y dañino asociar a las fintech con el crimen o el lavado de activos y destacó que su ecosistema promueve la formalización de miles de PyMEs y emprendedores que operan en la provincia.
Un conflicto que sigue escalando
El cruce entre Mercado Libre y Santa Fe es parte de una discusión más amplia sobre la regulación de las fintech y las plataformas de comercio electrónico en Argentina. La provincia sostiene que las plataformas deben tributar de manera equitativa con los comercios físicos, mientras que la empresa de Galperín defiende que los impuestos elevados afectan la competitividad y perjudican a los consumidores.
Mientras tanto, el gobierno santafesino ratificó su postura y aseguró que seguirá controlando el comercio electrónico para evitar competencia desleal. Habrá que esperar si la disputa se resuelve en la mesa de negociación o si la tensión seguirá en aumento.